La provincia alicante cuenta con una gran variedad de entornos y paisajes que dan pie a lugares peculiares que merecen la pena visitar. Municipios pintorescos con una personalidad propia que son capaces de dejarte imágenes y panorámicas únicas. ¿Quieres saber cuáles son nuestros favoritos? ¡Aquí tienes nuestros 9 pueblos con encanto en Alicante favoritos!
Pueblos con encanto en Alicante
Altea
Con su casco antiguo de calles empedradas y casas blancas, esta ciudad costera se destaca por su encanto mediterráneo. Un paseo por las estrechas calles del casco antiguo te lleva a la icónica iglesia de Nuestra Señora del Consuelo, con su impresionante cúpula de azulejos azules y blancos. Desde el Mirador Cronistas de España, disfrutarás de unas vistas panorámicas espectaculares del mar y las montañas circundantes. Altea es también conocida por su animada vida artística y cultural, con numerosas galerías de arte y festivales a lo largo del año.
Villajoyosa
Es conocida por su pintoresco paseo marítimo y sus casas de colores frente al mar. Esta ciudad costera es famosa por su historia relacionada con el chocolate, ya que aquí se produce el famoso chocolate Valor. Puedes aprender más sobre la historia del chocolate en el Museo del Chocolate y, luego, pasear por el casco antiguo de la ciudad, con calles estrechas y casas encaladas. No olvides probar la deliciosa gastronomía local en los restaurantes y bares que bordean la playa.
Xàbia (Jávea)
Xàbia es un hermoso pueblo costero conocido por su gran diversidad de playas y calas. El casco antiguo, conocido como el «Barrio Antiguo,» es un laberinto de calles empedradas con casas de estilo mediterráneo y balcones decorados con flores. Uno de los puntos destacados de Xàbia es el cabo de San Antonio, un parque natural que ofrece rutas de senderismo y vistas panorámicas impresionantes. Además, la playa del Arenal es un lugar popular para disfrutar del sol y el mar.
Polop de la Marina
Polop es un pequeño pueblo de montaña con un casco antiguo encantador. Desde el Mirador del Carrer Major, disfrutarás de vistas espectaculares de la Costa Blanca y el mar Mediterráneo. El pueblo es conocido por su arquitectura típica de la región, con casas encaladas y detalles en azul. Las calles adoquinadas y las plazas son perfectas para pasear y descubrir la auténtica vida española. Además, el castillo de Polop, que se alza sobre el pueblo, es una estructura histórica que merece una visita.
Biar
Biar es un pintoresco pueblo con un casco antiguo bien conservado. Uno de sus principales atractivos es el castillo de Biar, una impresionante fortaleza medieval que se alza sobre la ciudad. Las calles empedradas y las casas de colores añaden un toque de encanto a este lugar. El casco antiguo está repleto de historia y cultura, y hay numerosos monumentos y plazas donde puedes empaparte de la atmósfera local. Biar también es famosa por su producción de aceite de oliva, por lo que puedes probar el aceite local en tiendas y restaurantes.
Alcoy
Alcoy es una ciudad con un rico patrimonio histórico y arquitectónico. Es conocida por su arquitectura modernista, que se exhibe en edificios como el Círculo Industrial y el Teatro Principal. Además, Alcoy es famosa por ser la cuna de la popular fiesta de Moros y Cristianos, que se celebra en abril. El casco antiguo está lleno de calles estrechas y plazas con encanto, como la Plaza de España, que es un lugar agradable para tomar un café o disfrutar de la comida local. El parque natural de la Font Roja, cerca de Alcoy, es un lugar perfecto para disfrutar de la naturaleza.
El Castell de Guadalest
Este pequeño pueblo está situado cerca del castillo del mismo nombre y es un lugar verdaderamente único. El castillo de Guadalest, construido en lo alto de un acantilado, ofrece vistas espectaculares de la región circundante. El pueblo en sí es un remanso de tranquilidad con calles empedradas y casas de montaña. El museo de Guadalest es una visita obligada, ya que alberga una impresionante colección de arte y antigüedades.
Dénia
Su casco antiguo es un laberinto de calles empedradas y casas antiguas con fachadas coloridas y balcones floridos. En el corazón de la ciudad se encuentra el Castillo de Dénia, que data del siglo XI y ofrece impresionantes vistas al mar y a la ciudad. El puerto de Dénia es un lugar animado donde se pueden encontrar restaurantes que sirven platos de pescado fresco y marisco, así como una gran variedad de actividades náuticas. Dénia también es famosa por su gastronomía, y ha sido galardonada con el título de Ciudad Creativa de la Gastronomía por la UNESCO, lo que la convierte en un destino culinario destacado.
Benissa
Benissa es un pueblo encantador con una arquitectura histórica bien conservada. La iglesia parroquial de la Puríssima Xiqueta es una estructura impresionante que domina el casco antiguo. Las calles empedradas y las casas antiguas añaden carácter a este lugar. La Plaza Rey Jaime I es el corazón del casco antiguo y un lugar agradable para relajarse en una terraza y disfrutar de la atmósfera local.
Estos pueblos con encanto en Alicante ofrecen una variedad de experiencias únicas, desde la historia y la arquitectura hasta la belleza natural y la gastronomía local. Cada uno de ellos te invita a sumergirte en la auténtica vida mediterránea y a disfrutar de su singular carácter y ambiente. Desde el Hotel Don Pancho en Benidorm tienes el punto de partida perfecto para descubrir todos estos lugares.
